A más de una década: arrancó el juicio por la muerte de Gisela y Cergio Ferreyra ocurrido en Apóstoles

Tras 11 años de espera, a principios de esta semana se puso en marcha el juicio oral en el caso del homicidio de Gisela Lorena Ferreyra (32) y de su hijo Cergio Maximiliano Ferreyra (12), atropellados en Apóstoles por Adrián Alberto Krutki (36), quien iba alcoholizado al volante y se dio a la fuga en la fatídica noche del 11 de diciembre del 2011. 

En este marco, el pasado miércoles 12, en la sala de audiencias del Palacio de Justicia de la ciudad de Posadas (Av. Centenario), se llevó adelante la segunda jornada del debate a cargo del Tribunal unipersonal encabezado por el juez Correccional y de Menores Dos, Cesar Raúl Jiménez.

Entre los presentes en la sala estuvieron el abogado del imputado José Antonio Reyes, quien lo representó en la causa durante todo este tiempo; la fiscal Amalia Spinnato a cargo de la acusación en calidad de subrogante; la querella representada por la letrada Margarita Beltrametti; la madre y abuela de las víctimas, Rosa Ferreyra, y otros.

En la oportunidad, fueron 8 los testigos que prestaron declaración entre ellos el licenciado en Criminalística Daniel Balmaceda, uno de los primeros en llegar a la escena del trágico suceso sobre la Ruta Provincial 1 camino a Azara y la bioquímica María Balzczevich, encargada de realizar el examen de alcoholemia que arrojó 1,56 gramos de alcohol en sangre para el imputado.

Testigo y hermana

Una de las palabras más resonantes de la fecha fue el de la hermana del acusado, Mariela Krutki, quien en el momento del hecho iba de acompañante: “Somos muy conscientes del dolor que causamos. No somos malas personas. Fue un accidente (…) pedimos perdón (…) para nosotros tampoco fueron fáciles estos once años”, aseguró.

Sobre el imputado

Cabe recordar que la carátula de la causa que tiene como único imputado a Adrián Krutki, marca los cargos de "homicidio culposo agravado y lesiones culposas agravadas en concurso real concursando realmente con abandono de persona seguida de muerte". 

En este sentido, a pesar del grave delito cometido, el acusado enfrenta el juicio en libertad y tampoco estuvo detenido dado que al momento de dictar su procesamiento con prisión preventiva no fue encontrado en su domicilio y posterior a eso logró la excarcelación bajo caución.